Nuestro país ha dado lugar a grandes figuras e inventos que han contribuido al progreso. Sin embargo, no todos han tenido el éxito que habría cabido esperar y muchos de estos nombres han caído en el olvido.
Pioneros de la ciencia española
Un estudio sobre las aportaciones españolas a la ciencia
…la desgracia de este país consiste en que sus hijos, lejos de defenderle, le acriminan; lejos de glorificarle, le culpan y ayudan a renegar de un pasado en que hay seguramente mucho bueno, que nos es desconocido, porque no queremos conocerlo - Felipe Picatoste.
Desde este espacio se destacan a los españoles que desde la Edad Media hasta la actualidad han aportado los más importantes conocimientos en los campos de las ciencias naturales o han dado origen a los descubrimientos más relevantes.
Se espera, de esta manera, ofrecer información que establezca resultados en el proceso de comprensión sobre las particularidades de la ciencia española a partir de la revisión de la bibliografía concerniente a este tema.
La visión tradicional de la historia de la ciencia moderna ha tenido mucho que ver en el olvido de las contribuciones ibéricas por parte de los historiadores. Lo que se ha impuesto es un enfoque esencialmente franco-anglosajón pues el componente hispano ha sido tan despreciado en Occidente, o más, que cualquier tipo de cultura no occidental. En este contexto particular se trata de impulsarlas en el marco más amplio de la ciencia europea de la modernidad.
La importancia de la ciencia y la tecnología en la sociedad actual.
El papel de la ciencia es parte esencial de los estados modernos y necesita de una voluntad política clara para conseguir una economía competitiva. El gasto en I+D tiene una influencia positiva en la productividad, con un tasa de retorno que supera a las inversiones convencionales. La relación existente entre inversión en I+D, producción científica, nivel educativo y riqueza resulta evidente. La educación científica de los jóvenes es al menos tan importante, quizá incluso más, que la propia investigación. Formar ciudadados científicamente cultos significa enseñarles a desmitificar y decodificar las creencias adheridas a la ciencia y a los científicos para lograr individuos más críticos, más responsables y más comprometidos con el mundo y sus problemas.
Según los últimos informes España se sitúa en la novena posición del ranking mundial en producción científica y entre los 30 paises más innovadores del mundo. Sin embargo en 2022 España invierte el 1,4% de su PIB en investigación científica, muy por debajo de la media europea que se sitúa en el 2,3%.
Uno de los retos se centra ahora en conseguir aumentar el número de investigadores que trabajan en el sector privado, dado que la I+D en la empresa impulsa la innovación.
Si se observan los datos de los últimos 10 años, España ha registrado el mayor aumento de solicitudes anuales de patentes europeas en comparación con hace una década posicionándose como uno de los principales países europeos con más invenciones.
El nivel de creación de soluciones, de tecnología puntera, sostenibilidad y talento es muy alto y da la impresión que España está por encima de los países de nuestro entorno. Debido a que no podemos competir a nivel financiación con nuestros competidores europeos o de Estados Unidos hacemos mucho más con mucho menos. Este problema de financiación genera un problema estructural ya que el sistema no capta suficiente talento internacional e impide una ciencia de vanguardia.
España, necesita trabajadores especializados en el sector tecnológico y la relación que existe con las entidades educativas, es cada vez mayor. Tanto los estudiantes como los profesionales tienen dificultades para satisfacer la alta demanda y la vertiginosa evolución que está experimentando la tecnología. Sin embargo, España tiene la capacidad de convertirse en una potencia tecnológica y ser el estado que más crezca en este sentido dentro de la Unión Europea. Para ello el Gobierno y otras instituciones deben promover cursos o talleres intensivos. Las empresas deben trabajar con universidades o instituciones educativas para crear currículos tecnológicos, preparando a los estudiantes exactamente para lo que se demanda y fortaleciendo los programas de mentoría dentro de las organizaciones.
Las empresas e inventores españoles presentaron la mayoría de patentes internacionales en los campos de la energía solar térmica, la energía eólica, la edificación, la energía solar fotovoltaica y los productos de consumo. Esto indica que España está más especializada en las áreas de energía solar térmica, energía eólica y energía oceánica.
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) es la principal agencia pública dedicada a la investigación científica en el país. Se clasificó como la quinta institución científica gubernamental más importante a nivel mundial.
Desde 2006, el Mobile World Congress tiene lugar en Barcelona.
Existe una nueva carrera espacial con grandes actores como EEUU y China y en el que España es una potencia emergente en el sector. Aunque el aporte europeo en inversion al sector espacial sea mucho menor que en EEUU, la recién creada Agencia Espacial Española dará un gran impulso y desarrollará bastante el sector. La empresa privada intenta superar esta carencia con diversos proyectos como son PLD Space, que desarrolla los cohetes Miura 1 (suborbital) y el Miura 5 (orbital) así como el motor TEPREL; Zero 2 Infinity, que cuenta con el Bloostar (orbital); y Pangea Aerospace, que trabaja en un lanzador orbital denominado Meso con motor tipo aerospike hecho con impresión 3D.
Desde que España puso en órbita su primer satélite en el año 1974, el sector de la industria espacial ha experimentado un enorme crecimiento en nuestro país, siendo en la actualidad uno de los pocos con capacidad técnica y científica para diseñar y desarrollar de forma completa una nave espacial. La industria aeroespacial española proporciona empleo directo y cualificado a más de 5.000 personas habiendo sido capaz de poner en órbita un total de 48 satélites.